Este curso ofrece un recorrido a través de los hitos clave de la historia antigua y medieval, explorando las civilizaciones que sentaron las bases de la cultura y el pensamiento occidental. Desde las grandes ciudades-estado de la antigua Mesopotamia hasta la formación de los reinos medievales de Europa, examinaremos las interacciones entre pueblos, imperios, religiones y culturas que le dan sentido a estos periodos históricos.

La Historia Antigua se enfoca en los orígenes de las primeras sociedades donde comenzaron a gestarse formas de gobierno, religiones y culturas que influirían en toda la historia posterior. Mesopotamia y Egipto, pasando por el mundo clásico de Grecia y Roma, hasta las primeras interacciones con otros pueblos y culturas en la antigüedad, entenderemos cómo esos procesos establecieron las bases para el mundo medieval.

La caída del Imperio Romano de Occidente marco la transición del mundo antiguo la Edad Media, periodo histórico que da cuenta de nuevos órdenes políticos, sociales y culturales. Este periodo, a menudo mal comprendido y asociado únicamente con el caos y la oscuridad, fue en realidad una era de profundas transformaciones. Durante la Edad Media, nacieron el feudalismo, el sistema de monarquías medievales, y se consolidaron las instituciones religiosas, como la Iglesia católica, que jugaron un papel clave en la conformación de la identidad de Europa.

Aunque las civilizaciones del Próximo Oriente Antiguo y la Europa Medieval pueden parecer distantes, existieron múltiples formas de conexión entre ellas. Los intercambios culturales, la influencia religiosa y las relaciones políticas entre ambas regiones sentaron las bases de muchos desarrollos clave en la historia mundial. De esta forma, se espera que los estudiantes no solo conozcan mejor estas épocas históricas, sino también reflexionen sobre cómo la historia antigua y medieval sigue influyendo en la sociedad actual.